Empieza la temporada

Tras el brillante colofón que la temporada 2009-2010 tuvo en la Travesía del Mar de La Granja llegó el periodo de descanso para los nadadores y entrenadores segovianos, que seguro que todos han aprovechado para "cargar las pilas" de cara a la nueva temporada.

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Pero ya es tiempo de volver a la acción y la temporada ya está comenzado con el Trofeo Federación, el nadador completo... es el momento de plantearse las metas para esta nueva temporada, y para ello debemos comenzar reflexionando sobre la pasada campaña, contestando, por ejemplo, a la siguientes cuestiones:

¿Conseguí mis objetivos la pasada temporada?

¿Fue sencillo o difícil alcanzarlos?

¿Hice todo lo que pude para lograrlo?

¿Qué me impidió (si es el caso) alcanzarlos?

Cuestionándonos de esta forma podremos ver si nuestros objetivos eran demasiado fáciles (si los alcanzamos con facilidad, sin esfuerzo), demasiado difíciles (si nos ha sido imposible alcanzarlos), si eran acordes con nuestro compromiso (cuando más difícil sea el objetivo más esfuerzo y dedicación va a requerir), si nos hemos equivocado en la forma de abordarlos (por poner un ejemplo clásico: nuestro objetivo es el territorial, pero llegamos pasados por haber apretado demasiado para lograr las mínimas), y lo más importante de todo, si estamos satisfechos con lo que hemos hecho (tanto en cuanto a consecución de objetivos como de esfuerzo puesto en ello).

A partir de ahí podemos comenzar a plantearnos la siguiente temporada, ajustar mejor nuestros objetivos y nivel de compromiso (siendo realistas con nuestras capacidades y el tiempo que podemos/queremos dedicar a ello) y ponernos manos a la obra.

Si nadamos porque nos gusta y nos hace sentir bien nuestro objetivo puede ser simplemente mantenernos entrenando, nadar x días a la semana...

Si nadamos porque queremos competir podremos marcarnos como objetivo lograr una marca determinada, acceder a un campeonato, luchar por las medallas, batir un record, formar parte del equipo de relevos de mi club... o también ser constante en los entrenamientos, entrenar más o mejor que el año pasado, mejorar la técnica...

Sea cual sea nuestro objetivo debemos tenerlo presente en todo momento (o al menos todo el tiempo que dediquemos al entrenamiento). Por ejemplo los grandes equipos americanos y australianos acostumbran a tener sus piscinas repletas de mensajes motivantes en las paredes a la vista de todos los nadadores. O llevado más al extremo, Dawn Fraser, que fue la primera mujer en bajar del minuto en los 100 m libres, cuando estaba cerca de lograr ese hito se compró un coche y consiguió que la matrícula fuera 59.999...

...sin ir tan lejos también podemos escribir nuestro objetivo en la tabla para tenerlo delante siempre que hacemos patada, o tener un cartel en nuestra habitación con nuestro objetivo marcado y/o fotos que nos hagan pensar en él y nos motiven.

Pero siempre, siempre, debemos tener un objetivo, da igual que sea sentirnos bien, ponerse en forma, o ser campeón del mundo. Debemos saber porque hacemos lo que hacemos, porque nos esforzamos, porque damos una brazada más cuando nuestro cuerpo hace tiempo que ha dicho "¡basta!"... esa es la "chispa" que enciende el motor de cualquier deportista, ese es el "fuego interno" que alimenta su ambición, su espíritu de superación.

!Buena temporada a todos!